Visita nuestra página de Facebook
Visita nuestro perfil de Twitter
Visita nuestro perfil de Instagram
Visita nuestro canal de YouTube
Visita nuestro perfil de LinkedIN
Contacto

Esta web incluye contenido para personas sordas

PORTAL DE ONG: AVANZAMOS EN TRANSFORMACIÓN DIGITAL

COMUNICACIÓN

Noticias

"No hay visión real de la oportunidad que supone incorporar a personas con discapacidad en la cadena de valor de una empresa"

La responsabilidad social es necesaria para construir organizaciones y sociedades sostenibles. Para Enrique Galván se trata de un compromiso que empapa a toda la organización, ya sean grandes corporaciones o pequeñas entidades. En el mundo empresarial es necesario un mayor compromiso, que se vea la oportunidad que supone incorporar a personas con discapacidad en la cadena de valor de una empresa.

Entrevista realiza por Juan Antonio Ledesma para CERMI.

01/10/2013

Con seis millones de personas sin empleo, la responsabilidad social empresarial se antoja, a priori, una necesidad imperiosa en la cadena de valor de las empresas. ¿Es pretencioso pensar así?
 
Parece necesario pensar así. La crisis ha puesto en cuestión muchos elementos sociales y económicos, pero creo que la RSE, los principios y valores que la sustentan, han aguantado bien y de la salida de la crisis la RS saldrá reforzada. Ciertamente con algún reenfoque, que potencie la coherencia de las organizaciones y su transparencia frente a una utilización más cosmética.
 
Seis millones de parados son un escándalo mayúsculo que se traduce en dramas personales y en cierre de muchos proyectos empresariales. Tal vez si se hubiera contado con una sólida estrategia de RS en las administraciones públicas, empresas y entidades financieras esto no hubiera sido tan grave.
 
Por tanto estamos hablando de una pieza necesaria del puzle para construir organizaciones y sociedades sostenibles.
 
Perdón por la desconfianza, pero son muchas las memorias empresariales que arrinconan la RSE a un epígrafe aislado. ¿No debería ser un objetivo transversal y aplicable a todos y cada uno de los departamentos de una compañía?
 
Una empresa transmite responsabilidad social o no lo hace. No creo que solo esté en relación con que se disponga de más gente o menos en estos temas o se estiren las memorias de una forma u otra.
 
La responsabilidad social es un estilo y un compromiso que empapa a toda la organización, que al final, bebe del respeto y promoción de los derechos y la dignidad de todos y de nuestro entorno natural y se siente como elemento compartido por los que conforman la organización.
 
Año tras años, España ocupa los últimos puestos entre los países industrializados de la OCDE en tasa de ocupación laboral de personas con discapacidad. Una triste realidad que se daba en años de bonanza económica y que ahora, sumergidos en la recesión, se ha agravado. ¿Qué estamos haciendo mal para no corregir este grave problema?
 
La falta de liderazgo es una de las causas de esta realidad. No hay visión real de las oportunidades que supone incorporar a las personas con discapacidad en la cadena de valor de una empresa y por elevación en nuestra sociedad, además de ser un tema de derechos. Mientras se considere un problema y no una solución tendremos esa sensación de atasco. Creo que se pierde una importante fuerza laboral imprescindible para el bienestar del conjunto. No hay ni conocimiento ni visión de la pérdida que esto significa. Un dato importante: el sector de la discapacidad ha sido el único capaz de crear empleo en un contexto tan duro de crisis.
 
Este liderazgo al que me refiero precisa de una gran estrategia transversal que comienza con el impulso de las políticas educativas, promoción del empleo, medidas de activación, incentivos a la empresa, ayudas significativas a la economía social y, por qué no decirlo, formación de directivos.
 
Las mejores empresas destacan porque ya han entendido e incorporado a las personas con discapacidad como parte interesada y relevante en su estrategia de negocio. Podemos mirar en los Premios Ability de Telefónica qué tipo de empresas compiten.
 
Dicen los expertos, entre los que me atrevo a incluirle, que España tiene una legislación de primera en materia de discapacidad. Pero una cosa es la ley y otra su aplicación. ¿Fallan los controles administrativos para asegurar el cumplimiento de las cuotas de empleo reservadas a personas con discapacidad?
 
Ya sabe lo del chiste de los expertos, dice que son aquellos que dirán que el fin del mundo es algo imposible que ocurra justo un minuto antes de que estalle el planeta. Bueno en serio. Hay ciertamente importantes avances legislativos, pero queda todavía trecho por avanzar como un nuevo modelo de inclusión laboral de las personas con discapacidad o una ley que garantice de forma efectiva el derecho a una educación inclusiva de calidad.
 
No obstante es cierto que el cumplimiento de la reserva de cuota no deja de ser algo frustrante, pues después de tantos años demuestra lo impermeable que en general el ámbito del trabajo ha estado ante una parte de la sociedad y la permisividad de la administración ante ello.
 
Históricamente, las personas con discapacidad arrastraban como una losa colectiva carencias notables en la formación académica y profesional. Sin una formación cualificada, es difícil la incorporación al mercado laboral en condiciones de igualdad. ¿Hemos superado esa rémora?
 
Como dice es una losa y uno de los mayores obstáculos para alcanzar una igualdad efectiva. Los niveles de formación y las oportunidades para alcanzar las competencias y desarrollar el talento de las personas con discapacidad son muy bajos, como decía, se necesita de una decidida inversión porque sin ella no es posible generar avances. Hay personas que con su esfuerzo ofrecen verdaderos ejemplos de superación, pero hay que aspirar a alcanzar itinerarios formativos accesibles y pensando en las necesidades de las personas con diferentes discapacidades y que alcance a los distintos niveles académicos.
 
Un buen ejemplo es la convocatoria para la función pública donde a través del trabajo con la administración se diseñaron unos módulos formativos y pruebas que, respetando el marco de oposición, han posibilitado la incorporación de 53 funcionarias y funcionarios con discapacidad intelectual. Es un ejemplo del compromiso conjunto de la Administración Pública, del CERMI y dentro de él de FEAPS para alcanzar estos logros.
 
Le he leído afirmar que “el Modelo de Responsabilidad Social de FEAPS puede ser parte de la solución para mejorar las relaciones con las empresas, de cara a establecer alianzas sostenibles y colaboraciones de mutuo beneficio”. ¿Las empresas asumen que la RSE/D suma en su cadena de valores?
 
Como le decía las mejores lo tienen claro. Hoy en día hay más de un 2% de personas con discapacidad trabajando en la empresa ordinaria y eso convive con muchas empresas que no cumplen con la LISMI. Esto significa que hay organizaciones que comprenden que incluir la discapacidad como variable de enriquecimiento de su misión empresarial y su estrategia les ofrece un plus, pues suman a un diez por ciento de la población como potenciales empleados, clientes, proveedores, inversores y se conectan con un interesante sector como es el de las organizaciones de la discapacidad.
 
FEAPS comprendió hace más de 8 años que este ámbito es clave para todos tanto para las empresas como para nuestras entidades.
 
En esta sociedad tan golpeada por el desempleo, ser emprendedor es casi una heroicidad. Y tarea aún es más difícil para las personas con discapacidad…
 
Sin duda la nueva ley de emprendedores promociona y quiere generar estímulos en esta línea para desarrollar proyectos basados en la innovación y nuevas fórmulas empresariales. El momento no es el más propicio, pero sí que entiendo que uno de los colectivos en España que manifiesta más capacidad de emprendimiento es el de las personas con discapacidad. Por mi trabajo tengo la suerte de tener conocimiento de iniciativas verdaderamente brillantes. Cooperativas, penetración en sectores como el del medio ambiente, proyectos de alto contenido tecnológico, entre otros, están demostrando dentro de la dificultad formas de abrirse camino que tienen en común una ecuación que suma creatividad, conocimiento y valentía.
 
Usted preside la Comisión de RS del CERMI. ¿Qué iniciativas han tomado para conjugar con éxito empresa, responsabilidad, empleo y discapacidad?
 
La Comisión de RS del CERMI se ha propuesto como misión promover y difundir la Responsabilidad Social con especial atención al ámbito de la discapacidad, tanto en las entidades CERMI para su desarrollo organizativo como en el mundo empresarial, universitario, tercer sector y administraciones públicas. Hay ya mucho hecho dentro del sector, el trabajo de Fundación ONCE y su participación en la Red Europea de Responsabilidad Social y Discapacidad, la recién creada Fundacion BEQUAL o la campaña de Fundación ONCE y CERMI para conseguir que la discapacidad sea incorporada en las directrices del Global ReportingIniciative (GRI), el modelo FEAPS de Responsabilidad Social, etc. Tal vez debamos incidir en la idea de que este tema es algo de todos y aplica a las grandes corporaciones y también a las entidades pequeñas, que hay una labor que hacer de sensibilización y trabajo hacia el exterior, pero tan importante o más es demostrar que lo que pedimos lo hacemos en el interno y nuestras organizaciones tienen que crecer en responsabilidad social, en sostenibilidad y buen gobierno.
 
¿El CERMI ha trazado una estrategia que ayude a consolidar la responsabilidad social empresarial con los derechos de las personas con discapacidad?
 
Bueno el CERMI ha instado a las empresas, a las administraciones y a sus propias entidades a hacer suya la Convención de Derechos de las Personas con Discapacidad, creo que ese es el rumbo para todos y garantiza el vínculo directo entre derechos y una responsabilidad social bien orientada.
 
La última. Si yo fuera un empresario con “posibles”, ¿qué me diría para convencerme de que la RSE es buena para mis intereses y que es algo más que una moda pasajera?
 
Le diría que si quiere seguir teniendo posibles y aumentar sus resultados no debería dar la espalda a la RS como una herramienta de gestión empresarial de presente y futuro. Una RS más D por supuesto
< Volver